¿Qué pasó con las investigaciones por el accidente de los soldados que cayeron de un helicóptero en el Desfile de Silleteros 2019?
Captura de video ciudadano. Cortesía
Este martes 11 de agosto se cumplirá un año de uno de los sucesos más trágicos en el marco de la Feria de Las Flores, mientras muchos estaban pendientes del Desfile de Silleteros, dos soldados de la Fuerza Aérea Colombiana perdieron la vida. ¿En qué van las investigaciones?, ¿qué dice el padre de uno de los fallecidos?, ¿se reanudaron las operaciones con el sistema spice?.
Recuento de la tragedia
El domingo 11 de agosto de 2019 a las 3:30 p.m. cuando se cumplía el Desfile de Silleteros una tragedia marcó el cierre de la Feria de Las Flores de ese año. Una de las cuerdas que colgaba de uno los helicópteros de la Fuerza Aérea se soltó, los dos soldados que ondeaban el pabellón Nacional cayeron a la cabecera de la pista del aeropuerto Olaya Herrera.
Los dos integrantes de la Fuerza Aérea Colombiana que fallecieron en el lugar eran Sebastián Gamboa y Jesús Mosquera, ellos cayeron metros antes de que el helicóptero aterrizara en la pista del aeropuerto de Medellín.
Según informó el 12 de agosto de 2019 el general Rámses Rueda, comandante de la Fuerza Aérea, el accidente se presentó a 200 pies de altitud (60 metros). Por el hecho se abrieron dos investigaciones paralelas.
El comandante aseguró en su momento que una la adelantaría la Fiscalía General y Seccional con apoyo del FBI, y la otra un grupo de expertos de la FAC.
Así mismo, el comandante aseguró ese lunes que esperaba que ese viernes (16 de agosto) se tuviera un resultado de la investigación técnica, que se realizaba desde el momento del accidente. Como consecuencia del accidente se suspendieron las operaciones que se realizaban con el sistema spice, según el general Rueda, al menos mientras se conocía el resultado de la investigación.
Ese 12 de agosto también el comandante de la FAC reveló que la cuerda no se desprendió. “Hasta ahora puedo informar que sufrió una ruptura, un corte entre el helicóptero y los soldados, que es precisamente el foco de esta investigación”.
¿Qué ha pasado?
A cuatro días de cumplirse el primer aniversario del accidente Lacides Mosquera, padre del Sargento Mayor Jesús Mosquera (q.e.p.d), asegura que hasta ahora hay más dudas que certezas y pide justicia y verdad para la muerte de su hijo.
Según el padre del Sargento Mayor la vida familiar no se ha podido recuperar, él afirma que no tienen paz por la falta de claridad sobre lo que pasó esa tarde de domingo.
Don Lacides narra que ha enviado varios derechos de petición a la justicia civil y a la militar, para poder conocer algo del avance de la investigación, que paradójicamente cumplirá un año sin resultados conocidos.
Él asegura que «en este momento lo que está pasando es que la investigación no avanza». Agrega que «en lo militar ni se ha abierto, el juzgado 122 de instrucción penal militar está en preliminares, mientras que en la justicia ordinaria el juzgado 216 de Medellín es el que lleva el proceso y la cuerda sigue en Estados Unidos en manos del FBI».
Como padre Lacides enfatiza que no se rendirá y que no entiende porqué no hay resultados si «es muy fácil investigar, todos los elementos del vuelo fueron certificados y no por cualquiera, sino por personas expertas, todo queda por escrito».
Sobre las respuestas a los derechos de petición que ha enviado dice que ha lo que le han dicho no lo dejan satisfecho, pues se amparan en que hacen parte de la reserva sumarial o que son asuntos de seguridad nacional. Concluye diciendo que «se salen por las ramas, pero no puede ser así todo el tiempo».
Sabe que cumplirá un año sin su hijo, pero aun tiene aliento para seguir pidiendo información, justicia y hace un llamado a los medios y a todos los ciudadanos para que no permitan que el caso quede en el olvido. Lacides afirma que «agotaré todas las instancias colombianas, sino iré a las internacionales para saber qué pasó en el accidente de mi hijo, Voy a seguir insistiendo».
La familia del Sargento Mayor Jesús Mosquera
Jesús era el segundo de cuatro hijos, el mayor es artista plástico y vive en Bruselas, mientras las dos hermanas menores son médicas, una trabaja en Pereira, la otra lo hace con Médicos Sin Fronteras en Afganistán. El Sargento Mayor era casado, dedicó 18 años de sus 36 a la Fuerza Aérea, tenía un hijo que ahora tienen 11 años y además de su labor en la FAC estudiaba derecho en la Universidad Católica de Oriente.
La esposa del Sargento Mayor continua viviendo en Rionegro junto a su hijo, un niño de 11 años, que según su abuelo paterno ya entiende la perdida de su papá e intenta sobrellevarlo.
Según narra Lacides Mosquera, su esposa y nuera no se han podido reponer de la muerte de «Chucho», asegura que él para ellas era la ventana por la que veían el mundo.
Mientras los padres continuan viviendo en Quibdo, lugar al que Jesús iba cada que tenía espacio en sus ocupaciones, la esposa y el hijo viven en Rionegro con la abuela materna del niño.
Su padre extraña todo de su hijo, pero más que todo las visitas a Quibdó, donde iban a un criadero de pescado que tiene.
En cuanto a los trámites de la pensión del Sargento Mayor para su esposa, don Lacides asegura que está en trámite.
Este martes para conmemorar el primer aniversario de la muerte de Jesús Mosquera, su familia hará una misa en Quibdo, con solo 10 famliares, pues así lo exigen los protocolos de bioseguridad por el COVID-19. La ceremonia la compartirán con sus familiares por medio de redes sociales.
¿Qué sigue?
El martes 11 de agosto la FAC entregará un comunicado resolviendo algunas de las dudas que se han presentado durante este año. La Fiscalía espera por el resultado del análisis de la cuerda que se practica en Estados Unidos por parte del FBI, para así avanzar en las distintas líneas de investigación que tienen planteadas.
Su padre cree que «hay muchas cosas oscuras en el accidente de mi hijo. Con el rango que el tenía no le tocaba participar en eso, además él no quería ir, pero llegó una orden superior».
La familia Mosquera espera resultados, para poder resolver dudas y cerrar el duelo que lleva un año abierto. Así mismo, piden justicia y aseguran que «no nos interesa nada más, vamos a insistir en que se esclarezcan los hechos y saber exacamente que pasó allí. Eso sera lo que nos dará tranquilidad, mientras tanto seguiremos peleando por justicia».
Lea también:
- A Rionegro llegaron más ventiladores para ampliar camas de UCI
- La EDU envía cartas de agradecimiento al personal de salud escritas por ciudadanos
- Emvarias le da cariño y mantenimiento al Parque Inflexión
- Urbanizaciones no pueden pedir reporte de Covid-19
- OIEA dona a Colombia equipos y reactivos para realizar pruebas de COVID-19
- 63 deportistas de Medellín reciben beca del 100% para matrícula del pregrado
- Intensivista vence el COVID-19 y vuelve a primera línea de batalla contra la pandemia